Te miré,
te vi
te desvestí
y te dije:
amaré esas
dos magnolias
si me permites
conocerles
su sabor.
Me acerqué
los miré
con mi boca apunté
y los besé.
Me coloqué
siendo tú impenetrable
en ti entré
y enamoré
a esas dos magnolias
que así nombré.
No hay comentarios:
Publicar un comentario